El Monumento Nacional de Escocia es una estructura neoclásica situada en la colina de Calton, en Edimburgo. Originalmente diseñado para conmemorar a los soldados y marinos escoceses que murieron en las Guerras Napoleónicas, quedó incompleto debido a la falta de fondos. Es conocido por su parecido con el Partenón de Atenas y ofrece impresionantes vistas de la ciudad.