El barrio de Gràcia en Barcelona es conocido por su ambiente bohemio y auténtico. Ofrece una mezcla de cultura, arte y vida local con sus encantadoras plazas, boutiques únicas y numerosos bares y restaurantes. Es un lugar muy frecuentado por habitantes locales y turistas que buscan una experiencia más auténtica lejos de las áreas más turísticas de la ciudad.